acojadiz del trio no nombra al frio

para eso servía la llamada de adentro.

espaldas al viento, una voz baja canta

y el trio de obreros en el cuarto sin ventana

afuera-adentro

te suplico, resbalando así,

enfrente de nuestro radiante porvenir,

y que la voz caiga adentro:

paz. una vez. que se disimule el odio.

un trueno del cielo,

el trafico continua también

todos los sonidos están lejos,

reflejados suavemente por los muros.

son casi dos, las esferas en que me encuentro,

el quien eres entremedio

en que casa soñase, quien te llevo

mas allá del ultimo desierto

tierras fértil de olivos

o de cactus, flores de espina.